miércoles, 17 de abril de 2019

Fui agua


La batería, el no muy afinado vocalista, todo, todo calló. El río sonaba. Llamé sin voz a mi perro, que terminó apoderándose del espacio; dormimos abrazados. Nos sorprendió una voz, una mirada, un todo inquisidor. Deseé tener ante mí al genio de la lámpara, pedirle que desapareciera el instante, que retrocediera el tiempo, aunque volviera a mis oídos el suplicio de aquella música. Mi anhelado genio se desvaneció; escuché a la realidad y, dejándome envolver de la ilusa sublimidad, le aposté a ese querer creer en lo que quería creer. Le aposté al olvido.
Aterrizó otra voz, un aliento. Se asomaron otros ojos; brillaban. Habló un todo amor; descifraba el silencio, no juzgaba: las cosas tienen el curso que deben tener. Viajé con el canto de la corriente entre las piedras, entre las ramas. Besé a mi perro.
Reencontrándome con el todo inquisidor, volví a escuchar a la realidad; le aposté al pasará. Abrí una llave y recobré fuerza al sentir el agua sobre mi piel, deseando ser ese tibio líquido para enredarme en poros, cabellos. Siendo agua, me reencontré con el todo amor, el arrullo; feliz, di gracias al momento y le aposté al vivir.

*Del libro Fui agua.

sábado, 13 de abril de 2019


Usted me enseñó,
y como buena alumna 
me gradué en imaginar,
así que ahora enséñeme
a no ver sus ojos frente a los míos,
y a no escuchar desde ellos su silencio consolándome
cada vez que lloro.



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Seré del tiempo que no corre,
de la mirada que no parpadea,
del corazón que no late.
Por esto he decidido no correr.
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Foto

Atada a sonrisas;
a poros con maquillaje;
a poses antinaturales.
Nadie menos libre que tú.
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Quise volver
y recordé que nunca me fui.
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Aire asuntino

Dejo atrás la casa hecha oficina,
su fragancia a años,
su pintura rosada
adornada de inexpresivas caras,
gracias a la inevitable rutina.
Me detengo,
tomo la imagen
sobre este suelo lleno de amarillo y verde,
que también recibe al vaso plástico de vuelta pisoteado
bajo el imperdonable rayo.
Aun con el rayo,
la brisa amiga
entre las alpargatas, el traje azul, la guitarra
y el sombrero del hombre,
frente a este banco bajo las ramas,
testigo de mi cuerpo inquieto,
sediento de sombra
frente a postes y vitrales.

*Del libro Vereda Anónima.

www.elmundodesdecolima.mx

martes, 9 de abril de 2019

Revista InterExodus. Que disfruten su lectura.

"Anunciamos la publicación de la revista cultural InterExodus. Un espacio para promocionar el arte, la literatura, la filosofía, la historia y, en general, todo lo que implique confrontar las ideas con el espíritu de nuestro tiempo. No olviden compartirla con sus amistades. Saludos.
En la carpeta de Drive podrán encontrar tanto el formato en pliego (recomendado para computadoras) y el formato paginado (recomendado para dispositivos móviles)". En Facebook: Ramón Ordaz InterExodus Ediciones.




martes, 2 de abril de 2019

Insistimos en hacernos muchas preguntas, sin importar las pocas respuestas. Lo que es un hecho es que este mundo cada segundo nos sorprende, aunque no siempre estemos conscientes de esto. 
¿Cómo llegaste? Es increíble el parecido, cuando te veo de perfil y me concentro en tu mirada, la piel se me pone de gallina, los ojos se me cristalizan hasta el llanto, siento que eres mi primera Catira, y que, desde otro universo, viniste con este otro cuerpo. 
Gracias a la vida por estos misterios vueltos regalos de alegría.



Uno de abril

Mi melodía más amada no resiste otro mes. 
Inicia. 
No sé qué hacer. 
Tomo esta servilleta.
Hay clientes.
No puedo llorar.
Disimulo frente a esta pantalla.
Extraño mi silla.
Extraño mi mesa.
Extraño llegar a casa y no querer salir.
Mi melodía más amada sigue.
Me abraza.
Aquí estás.
También solitaria.
También escribiendo.
Tan lejos de tu silla.
Tan lejos de tu mesa.
Tan lejos de tu hogar.
Escúchame.
Te hace bien.
Retoma tu servilleta.
Los clientes no están.
Permítete llorar.


Por la Vereda 
bajo los cedros 
sobre las piedras: 
¡LIBERTAD!

#VenezuelaLibre


Lo que vivimos los venezolanos

Estoy escribiendo un libro sobre la actitud de los no venezolanos que no han pisado mi tierra, sin embargo, "piensan" que lo saben todo sobre ella, probablemente porque, desde la cómoda distancia que nos separa, "leen" sobre el tema, esto sumado a sus posibles títulos de "doctorado" (suponemos que se graduaron en la escuela de la arrogancia).
El libro dice así: "No importa cuántos diplomas tengas, no te creas muy culto, ya que cuando te atreves a afirmar -entre otras gracias- que no necesitamos ayuda humanitaria, negando el dolor ajeno, te conviertes en absolutamente nada, es decir, en un completo miserable".
18/03/2019.
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Se necesita tener mucha paciencia y sentir un gran amor por la humanidad para tolerar a un no venezolano que no ha estado en Venezuela, y se cree el cuento -defendiéndolo con bastante arrogancia- del dictador sobre el bloqueo económico. Aún más paciencia y aún más amor por la humanidad se necesita si eres venezolano, has vivido y sobrevivido en Venezuela, y hoy estás en Líbano, rodeado más de sirios que de libaneses... sirios que -al igual que nosotros, venezolanos- han huido de este otro dictador, y los escuchas y los entiendes porque te escuchas, y al mismo no venezolano (que no ha estado en Venezuela ni en Líbano ni en Siria) también se le ocurre defender -y con bastante prepotencia- a este otro dictador.
A estos "intelectuales", ¿dónde les compramos pastillas de humildad, para que reconozcan su ignorancia?
18/03/2019.
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Sobre el video que grabó y publicó el periodista Jorge Ramos:
Esto no es ningún amarillismo. El video se quedó corto comparado con lo que yo, Dalal, he visto con mis propios ojos. Esto es solo una pequeña muestra del día a día en las calles de mi país. Perdón, antes de pensar en el interés que muchos (incluyendo también a Cuba, a China, a Rusia…) tienen en nuestro petróleo, nos importa solucionar nuestra crisis humanitaria. Nuestra gente se está muriendo porque no tenemos ni vacunas para los niños recién nacidos, mientras que el dictador sigue afirmando que somos mentirosos, que no necesitamos nada, que vivimos muy bien. Basta tener un poco de corazón para ponernos en el lugar del otro, sobre todo cuando nos atrevemos a opinar desde otro país sin haber estado en Venezuela, sin haber vivido lo que vivimos los venezolanos.
28/02/2019.